Ministros serían responsables políticos de muertes en Puno. «Que se vayan a su casa», gritan.
Después de ver un video en que los pobladores de la zona atacan a mansalva a un reducido número de soldados del Ejército en Ilave, Puno, crece el clamor de que la presidenta Dina Boluarte renuncie si no puede recuperar Puno.
El material audiovisual dejó en evidencia los momentos de angustia que vivieron los miembros del Ejército peruano, que fueron largamente superados por los pobladores quienes, portando piedras, hondas y huaracas, atacaron sin piedad a los soldados que se vieron obligados a replegarse.
Lo grave es que en las imágenes se aprecia que los miembros de las fuerzas del orden no utilizan sus armas de fuego, pese a que la ley les permite hacer uso de ellas «en defensa propia o de otras personas, en caso de peligro inminente de muerte o lesiones graves, o con el propósito de evitar la comisión de un delito particularmente grave que entrañe una amenaza para la vida».
Aproximadamente unas 700 personas arremetieron contra unos 20 miembros de la milicia que se vieron obligados a huir y en la estampida uno de ellos cayó al piso y tuvo que ser auxiliado por sus compañeros. Los miembros del Ejército escaparon hasta las orillas del río Ilave, donde la cadena humana se rompió y algunos fueron arrastrados por la corriente hasta encontrar una triste muerte.
Evidentemente los violentistas aprovecharon el desconocimiento de la zona de parte de los soldados para conducirlos a un callejón sin salida.
Lamentablemente, al cierre de esta edición, se habían confirmado la muerte de seis soldados, quienes perecieron ahogados al intentar cruzar las caudalosas aguas del río Ilave en la provincia de El Collao, región Puno.