Considera que Dina Boluarte no está gobernando el país ni respeta las jerarquías de la PNP. Lamenta que el Congreso no ejerza su rol de control político.

Manuel Merino, ¿cómo analiza la situación que se vive en el sur del país tras las violentas protestas que dejaron más de 60 muertos?

La situación es caótica, tenemos una convulsión social y, a más de 100 días del gobierno de la señora Dina Boluarte, no hay control. Puno está al libre albedrío. Lamentablemente esa situación confirma lo que siempre estamos repitiendo: la señora Dina Boluarte no está gobernando el Perú. Le pedimos que gobierne el Perú para que podamos tener esperanza y salir adelante todos los peruanos.

El principal problema que tiene la Autoridad para la Reconstrucción con Cambios es que se convirtió en un cajón de sastre donde los diversos ministerios de Vivienda, o de Transportes, de Agricultura, de Salud y de Educación que tenían proyectos que carecían de financiamiento los pusieron en Reconstrucción con Cambios.

El programa de Reconstrucción con Cambios no pudo prevenir nada, no tenían planificación. El programa estuvo destinado a colegios, a agua y desagüe, a pistas y veredas, hospitales, pero no temas esenciales de planificación para evitar los desastres naturales.

Efectivamente. A ellos le asignaron varios millones de recursos. No se realizaron buenos proyectos. En mi región Tumbes tiraron un canal revestido de cemento que tenía más de 45 años. La Reconstrucción con Cambios dejó abandonadas muchas obras que se habían comenzado.

Es lamentable la falta de un estricto control. La Contraloría General de la República no es vinculante. Si el control concurrente de la Contraloría General de la República fuera vinculante sería mejor. El Congreso de la República ha tenido una comisión de seguimiento a Reconstrucción con Cambios, pero poco se hizo a pesar de los esfuerzos iniciales. El Congreso perdió mucho el control político. Hay que hacer un verdadero seguimiento a las obras.

El tema de prevención es fundamental. Los puentes han sido reconstruidos en el mismo lugar, no se hizo un verdadero estudio. Muchas cosas se hicieron mal y aún no se corrigen.
Hay abandono de muchos pueblos por parte del Estado, a pesar de tener presupuesto para atenderlos.

En la Policía Nacional del Perú (PNP) estamos viendo hace tiempo un debilitamiento institucional. Este debilitamiento se inicia con el señor Martín Vizcarra y se profundiza de manera más agresiva con Francisco Sagasti, quien destituyó a aproximadamente 20 generales. Se ha atentado contra las jerarquías de la Policía Nacional del Perú al no respetar los ascensos.

Lamentablemente, la señora Dina Boluarte tiene una actitud similar y el Congreso de la República no muestra tener un verdadero control político.

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